Diez cosas que... día 8: Deportes

Sigo con la dinámica propuesta por Raquel Castro de hacer una lista al día a lo largo de todo diciembre, y llegamos al día 8. Para saber de qué se trata, lean la explicación de Raquel en su sitio y síganla en Twitter como @raxxie_. Si participan, pueden compartir sus listas en redes con el ht #raxxiechallenge. Trataré de compartir las mías en Twitter, pero sin hacer hilos, así que cuando no quepan en un tuit estarán completas acá, junto con comentarios adicionales.

El tema elegido para el día 8 es

Diez deportes que he practicado o me gustaría practicar

Por mi físico no lo parece, pero desde siempre fui afecto a practicar deportes, y lo hacía de forma más que competente, en parte porque siempre he sido de rápido aprendizaje. Dicho lo anterior, a estas alturas parecería una necedad tratar de aprender un nuevo deporte. Como sea, les dejo una lista de deportes que he practicado a lo largo de mi vida, complementada con algunos que quedaron sólo en las ganas de hacerlo.

1. Basquetbol. Entiendo que lo correcto es llamarle baloncesto, pero nunca me ha gustado del todo ese nombre. Empecé a practicarlo al entrar a la secundaria y muy pronto se volvió uno de mis deportes favoritos. Lo dejé hace muy pocos años.
2. Fútbol. Imagino que éste es casi de cajón para cualquier niño en México. Crecí en una privada cerrada al tráfico vehicular, así que cancha nunca faltó, y a partir de los seis años me uní a un equipo, donde jugué hasta la separación de mis padres y la consecuente mudanza. Después de eso sólo hubo los juegos en la escuela y la ocasional "cascarita" con amigos.
3. Futbol americano. Mi roce formal con peste deporte, uno de mis favoritos, fue muy corto, pues fueron sólo unos meses con los Tigres del CCH Sur, donde alternaba como ala cerrada y linebacker. Lo dejé porque para entonces ya trabajaba y no podía conservar mi empleo sin descuidar los entrenamientos. Después se limitó a jugar "tochito" y tocho bandera con los amigos. Por unos años fue motivo de reuniones dominicales en un parque al sur de la ciudad, pero la última vez fue hace casi diez años.
4. Frontenis. Por un tiempo mis primos y yo tuvimos acceso a unas instalaciones deportivas propiedad del IMSS, y fue ahí donde lo practicábamos. Ya mencioné mi facilidad para aprender, así que puedo presumir que llegamos al punto en que jugaba contra dos de ellos. Algunos dicen que el ser zurdo me daba ciertas ventajas, pero no sé que tanto haya de eso.
5. Balonmano. Lo practiqué sólo durante mis años de secundaria, pero me gustaba bastante y no era malo. Fui parte del equipo de la escuela para mi grado los tres años. Supongo que me gustaba porque combinaba los que entonces eran mis dos deportes favoritos: basquetbol y fútbol.
6. Voleibol. Otro de los años de secundaria que me gustaba pero resulta difícil de practicar fuera de la escuela o clubes deportivos por la necesidad de la cancha con red y la dificultad de reunir a una docena de interesados, pero también lo disfruté mientras duró. 
7. Unibol. Este es poco común y también fue sólo durante mis años de secundaria. Se juega en un área circular con un balón de basquet y un aro sobre un poste central. La ausencia de un tablero me ayudó a mejorar mi tiro de media distancia en el basquet.
8. Tenis. Y aquí llegamos a los que me hubiera gustado practicar. Asumo que el poder jugar bien al frontenis hubiera sido un buen comienzo, pero no es como si hubiera canchas de tenis por todos lados, así que nunca pasó de aspiración.
9. Squash. Lo veía como una versión de alta velocidad del frontenis. Lo jugué una sola vez y me gustó mucho, pero al igual que con el tenis se trata de un deporte en que es caro por el sólo hecho de tener que pagar por el espacio para practicarlo.
10. Tae Kwon Do o Karate. Siempre he sido aficionado a las artes marciales, más por tratarse de disciplinas que implican una filosofía y mentalidad que como deporte de contacto, así que me hubiera gustado mucho poder practicar alguna de ellas. Si fuera de tendencias más violentas tal vez el kickboxing o el boxeo me habrían llamado la atención, al igual que el jiu jitsu o las artes marciales mixtas, pero esto último apenas existía cuando era joven.