Parker es un rudo y amoral ladrón que el escritor Donald E. Westlake creó bajo el seudónimo de Richard Stark. Además de dos docenas de novelas, el personaje ha sido llevado al cine varias veces de mano de actores como Lee Marvin, Robert Duvall, Mel Gibson, Jason Statham, Jim Brown, Chow Yun-Fat e incluso Anna Karina (sí, hay una mujer en esta lista).
Hace meses empecé de nuevo a reseñar libros, y al igual que con otras sagas me hice el propósito de comentar la serie entera y en orden, por lo que ya intercalé en mis pendientes muchas de las novelas que no he leído.
The Outfit es la tercera novela de la serie, originalmente publicada en 1963, y es una secuela directa de The Hunter y The Man with the Getaway Face, así que recomiendo leerlas en orden. Por lo mismo, aunque escribo todas mis reseñas cuidando de no incluir spoilers (a menos que sea intencional, en cuyo caso aviso de forma oportuna), en este caso algunos de mis comentarios pueden revelar detalles de las novelas anteriores, así que si no las han leído y tienen intención de hacerlo, sugiero visiten antes mis reseñas previas.
Desde la primera novela nos enteramos de la existencia de The Outfit, un sindicato criminal con base en la ciudad de Nueva York y con quien Parker tuvo un desencuentro en una intriga llena de traiciones que lo llevó a hacerse cirugía cosmética. Armado con un nuevo rostro, Parker intentó retomar su vida y trabajo, pues agotó sus ahorros con la cirugía, pero los problemas no cesaron. Tras verse como blanco de un sicario, Parker decide que ya fue suficiente y es momento de llevar la guerra a terreno contrario.
Los conocidos y viejos asociados de Parker ejecutan una docena de golpes en contra del sindicato, lo que causa conflictos al interior de la organización, y Parker se dispone a lidiar directamente con la cabeza de The Outfit, el hombre que desde una elegante oficina en la ciudad de Nueva York aprobó todas y cada una de las acciones en su contra, incluyendo el ataque del sicario que falló en el intento de asesinarlo, y no importa que tan a salvo se sienta rodeado de guardaespaldas, jamás ha enfrentado una amenaza como Parker.
La prosa de Westlake es compacta y muy efectiva. Con una precisión y economía que refleja la forma de actuar de su amoral protagonista, el prolífico escritor crea una historia que atrapa al lector desde las primeras líneas, hablando de lo cual, permítanme compartir mi traducción de la forma en que abre esta entretenida novela:
"Cuando la mujer gritó, Parker despertó y rodó fuera de la cama. Mientras lo hacía, escuchó tras de sí el plop de un silenciador y la bala perforó la almohada donde su cabeza había estado".
Al igual que la gran mayoría de las novelas de Parker, The Outfit está narrada con una estructura de cuatro secciones divididas en capítulos, pero por tratarse de una historia de venganza y no acerca de un golpe criminal, arranca con un intento de homicidio en contra de Parker, por lo que difiere un poco del esquema narrativo tradicional de la serie, aunque ver cómo Parker planea y ejecuta sus planes resulta al menos tan entretenido como verlo planear un golpe y después lidiar con los obstáculos y adversidades que se le presentan.
Esta novela fue la segunda de cuatro historias de Parker que Darwyn Cooke (QEPD) adaptó como novelas gráficas hace unos años, las cuales fueron publicadas a través del sello IDW entre 2009 y 2014, gozando de gran aceptación entre crítica y lectores, y las cuales probablemente merezcan un comentario posterior para ahondar en ellas de forma independiente. Los otros títulos adaptados fueron The Hunter, The Score y Slayground, aunque hay que señalar que la última de ellas incluye también una muy breve versión de The Seventh.
The Outfit es una ágil y entretenida novela de crimen que debe resultar del agrado de todo aficionado al género. Si no lo son pero les agradan las historias bien contadas y no tienen problema con leer sobre un protagonista amoral y violento, creo que es una disfrutable experiencia de lectura que puedo recomendar abiertamente, pero con las reservas propias de una obra vieja y violenta.
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