miércoles, 29 de diciembre de 2021

Hawkeye (2021)

La semana pasada llegó a su fin Hawkeye, miniserie desarrollada por Jonathan Igla para Marvel Studios que representa el quinto proyecto de TV de Marvel Studios y la más reciente adición al MCU. Los seis episodios se emitieron a través de Disney+ a lo largo del último mes. Además de showrunner, Igla fue jefe de escritores y escribió el primer y sexto episodios. Otros escritores que colaboraron en la serie son Elisa Clement, Katie Mathewson, Tanner Bean, Erin Cancino, Heather Quinn y Jenna Noel Frazier

Rhys Thomas dirigió tres episodios (1, 2, 6) y el resto fueron obra del dúo de directoras conocidas como Bert & Bertie. Jeremy Renner retomó el papel de Clint Barton que interpretó en varias películas del MCU, y le acompañan Hailee Steinfeld, Vera Farmiga, Tony Dalton, Alaqua Cox, Florence Pugh, Fra Fee, Linda Cardellini y Vincent D'Onofrio, entre otros. La serie se anunció en el verano de 2019, pero a causa de la pandemia la filmación dio inicio hasta diciembre de 2020 y concluyó en abril de este año. Los primeros dos episodios se estrenaron el 24 de noviembre y el resto uno por semana hasta el pasado miércoles 22, cuando apareció el último.

La historia tiene lugar un tiempo después de los sucesos narrados en Avengers: Endgame (2019), y sigue a Clint Barton (Renner) lidiando con algunas secuelas de sus acciones durante el "blip", periodo de cinco años en que desapareció la mitad de la población del universo. De visita en la ciudad de Nueva York con sus hijos, el arquero vengador debe enfrentar los fantasmas de su pasado cuando el traje de Ronin que usó por un tiempo aparece en una subasta en el mercado negro.

Por su parte, Kate Bishop (Steinfeld), joven heredera a la fortuna producto de una importante firma de seguridad privada, y quien de niña presenció las acciones de Hawkeye durante la invasión chitauri, atraviesa un momento difícil en la relación con su madre (Farmiga), pues no confía en Jack Duquesne (Dalton), su prometido, y menos después de verlo ofertar por la espada de Ronin en la mencionada subasta. Desde la batalla de Nueva York Kate practica la arquería y varias disciplinas de combate, y nada le gustaría más que ser una heroína.

Cuando los criminales conocidos como "The Tracksuit Mafia" irrumpen en la subasta en busca de un artículo en particular, Kate interviene para proteger a los asistentes, y sin pensarlo se pone el traje en subasta, sin saber que eso cambiará su vida para siempre, pues Maya Reyes (Cox), líder de los tracksuits, culpa a Ronin de la muerte de su padre, y ahora cree que el vigilante ha regresado. Clint impide que la maten y envía a sus hijos a casa, prometiendo que volverá antes de Navidad, pero antes debe limpiar el desastre en la Gran Manzana. 

La determinación de Maya por vengar a su padre y la combinación de entusiasmo e ingenuidad de Kate complican todo, y lo que parecía un problema de rápido solución se empieza a alargar, llevando a Clint a preguntarse si en verdad podrá pasar la Navidad al lado de su familia. Si los tracksuits y los problemas con Bishop Security no fueran suficiente, una figura del pasado de Natasha Romanoff entra en escena para poner en peligro a la inusual pareja de héroes mientras una siniestra figura del bajo mundo neoyorquino acecha en las sombras.

La serie captura el tono de algunas de las películas más exitosas del estudio, con una mezcla de acción, aventura, misterio y humor que se ha vuelto la marca de la casa, pero además agrega elementos propios de las películas de temporada, con el hombre de familia que debe superar una serie de complejos obstáculos para pasar la Navidad junto a su familia, y una joven que intenta entender si todavía tiene una familia con la cual convivir o algo qué celebrar, y el resultado, a pesar de sus fallas e imperfecciones, es bastante satisfactorio.

Una de las partes que me preocupaba desde que se anunció que Marvel Studios planeaba producir esta serie, es que a lo largo de sus apariciones en las películas de los Avengers, Clint nunca recibió el suficiente desarrollo como para pensar que pudiera cargar por sí mismo con una historia. Si me hubieran preguntado hace unos años, yo habría apostado a que veríamos una película que explorase su pasado con Black Widow y él como agentes de S.H.I.E.L.D., así que fue una sorpresa muy agradable que hallaran el modo de darle protagonismo.

En general Renner hace un buen trabajo con el personaje al que ha interpretado ya por diez años, y un reflejo de ese tiempo lo vemos bajo el tropo del héroe que se ha vuelto demasiado viejo para el trabajo. Clint se presenta como alguien cansado física y emocionalmente, no sólo por lo que ocurrió con Natasha o el periodo oscuro que atravesó durante el blip, sino porque ha reflexionado sobre el resto de su pasado y sus años como asesino al servicio del gobierno, y lo único que desea ahora es pasar más tiempo con su familia.

En ese sentido, la serie cumple con lo que parece uno de los temas principales de la Fase 4 del Universo Cinematográfico Marvel: el paso de estafeta. En ese sentido, la adición de Kate Bishop se siente fresca y oportuna. Desde los primeros momentos del primer episodio, entendemos a la perfección por qué desea convertirse en una heroína, pero a lo largo de la serie podemos apreciar los retos que eso implica y ver que su determinación no cede ni siquiera después de que queda claro que se trata de una actividad peligrosa.

Steinfeld fue una gran elección para interpretar a Kate, pues ofrece la mezcla de carisma y talento actoral que uno espera en la heroica protagonista de cualquier serie o película, y lidia sin problemas con las distintas facetas que hacen tan atractivo al personaje de Kate, una chica dura e inteligente, inocente y de buen corazón, y capaz de pasar de momentos de drama a acción o comedia sin problema alguno, además de que tiene una excelente química con Renner, lo que ayuda a que la relación entre ambos personajes se sienta orgánica.

La historia mantiene un tono balanceado a lo largo de los seis episodios, cada uno de los cuales tiene entre 45 minutos y una hora de duración, lo que da para una narrativa compacta (el cambio más positivo que hemos visto en las series de Marvel Studios comparadas con las que produjo Netflix hace unos años), aunque hay momentos en que uno desearía que hubiera habido más espacio para explorar a otros personajes, como Maya y los tracksuits o el propio Jack, que mayormente fue usado como distracción en uno de los misterios de la trama.

En el caso de Maya no me preocupa demasiado, porque ya sabemos que pronto tendrá su propia serie (Echo, todavía sin fecha de estreno), y es probable que Jack pueda reaparecer más adelante en algún otro proyecto. Aún no sabemos qué será de Kate, pues no ha habido anuncio alguno sobre una posible segunda temporada, y la verdad es que quizás no habría justificación para ella antes de que se presente otra situación, así que supongo que eventualmente la veremos al lado de otros de los jóvenes héroes que podrían reemplazar a los Avengers.

Muchos elementos argumentales y visuales de la serie están inspirados en el cómic Hawkeye, de Matt Fraction y David Aja que se publicó de 2013 a 2016. Fraction tiene un crédito como consultor, así que queda el consuelo de saber que al menos se reconoció y remuneró su trabajo, no así con Aja, pues toda la identidad visual de la serie, incluyendo los pósteres promocionales y las secuencias animadas de créditos están evidentemente basadas en su trabajo, pero él sólo recibió el acostumbrado "agradecimiento especial".

Supongo que debe haber un sector del público al que aún le molesta el alto nivel de continuidad en los proyectos de Marvel Studios, y es que a pesar de que la serie ofrece una historia completa y bien contada, queda claro que será disfrutada de mejor manera por aquellos que hayan visto las películas previas, y que para conocer el destino de algunos de los personajes será necesario que estén al pendiente de futuros proyectos pues, como ya comenté, no parece haber planes para una segunda temporada de Hawkeye.

El último episodio peca un poco del caos de tercer acto que se ha vuelto un problema común en las películas y series de Marvel, aunque en general es resuelto de buena manera. La serie mantiene la sana costumbre de Marvel de basar todos sus proyectos en los personajes, así que la mezcla de personajes humanos con distintos grados de desarrollo con acción, humor, y un poco de drama y misterio, resulta en un producto de sólido entretenimiento que además hizo un gran trabajo en el manejo del espíritu de temporada.

Hawkeye es una entretenida miniserie que debe resultar del agrado de todo aficionado al MCU gracias a sus carismáticos protagonistas e interesantes villanos, y será interesante ver la forma en que se sigue desarrollando este mundo luego del espectacular y cataclísmico desenlace de la etapa anterior del exitoso universo compartido. Serie bastante recomendable, aunque con la usual advertencia de que puede ser un tanto críptica para el espectador casual que quiera darle una probada al mundo creado por Marvel Studios.

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