Muchas de mis lecturas favoritas pertenecen a los géneros de fantasía, horror y ciencia ficción, pero algo que cada vez se vuelve más común, y en lo personal me encanta, es que las fronteras que dividen a esos géneros se vuelvan cada vez más etéreas y flexibles. Sí, es ridículo que algunas editoriales hayan creado etiquetas como "fantaciencia", "horror fantástico" y "horror científico" (fantasía oscura nunca me ha hecho tanto ruido), pero me gusta que los autores no se impongan límites a la hora de crear historias.
Sandman Slim, primera novela de la serie, da título a la misma. Otra sorpresa fue descubrir que era fantasía urbana sobrenatural con tintes de horror. James Stark aparece en Los Angeles tras pasar once años en el infierno. Sí, en el sentido literal. Stark era un joven mago que fue traicionado por sus "amigos" y enviado al inframundo. Ahí se convirtió en un asesino y golpeador bajo órdenes de Lucifer, y se ganó una reputación en la arena de combate, donde recibió el apodo de Sandman Slim, el monstruo humano a quien los demonios temen.
Ahora está de vuelta en la Tierra, y tiene tantas cosas por hacer que no sabe por donde empezar. Quiere venganza, claro, pero no sólo eso. También le gustaría obtener la absolución y, de ser posible, recuperar al amor de su vida. Pero el mal carácter desarrollado en su exilio, además de la intervención de fuerzas infernales y celestiales por igual, complican las cosas, sobre todo una vez que entiende las repercusiones del conflicto a su alrededor y de lo único que está seguro es de que no desea convertirse en el salvador del mundo.
En las páginas de esta novela Kadrey crea un mundo en que la magia y lo mundano se complementan de forma orgánica, muy similar a lo que Jim Butcher logró con los Dresden Files pero con un tono más oscuro e irreverente. Dresden es un hombre decente, una buena persona que intenta hacer lo correcto en las peores situaciones, pero Stark es cínico y egoísta, pragmático. Por algo los demonios lo consideran un implacable asesino que prefiere estar ebrio a lidiar con sus problemas en sobriedad.
Kadrey tiene una prosa libre de florituras, y aunque su historia tiene cierto aire de pulp, la simpleza del lenguaje da a la novela una frescura única que se perdería con adornos innecesarios. El autor se toma su tiempo para construir un mundo intrigante y lleno de personajes y situaciones interesantes, como un alquimista francés que hace siglos recorre el mundo o la cabeza parlante de un viejo conocido que Stark tuvo que conservar. Su arma/herramienta más útil es un mítico cuchillo mágico con múltiples usos, incluyendo la posibilidad de abrir portales para viajar entre planos y trasladarse a casi cualquier lugar.
Es evidente que Kadrey se divierte escribiendo las aventuras de Stark, y por fortuna se trata de la clase de diversión que se vuelve contagiosa. Hay un nuevo libro de la saga casi cada año, y al momento de escribir esto suman ya una docena.
En resumen, Sandman Slim es una oscura y violenta pero muy entretenida historia de fantasía que debe resultar del agrado de aficionados al horror, la fantasía oscura y el neo noir con toques sobrenaturales. No es para todos los gustos, pero si son fan de cosas como las anteriores o están en busca de algo diferente, se trata de una excelente opción. Altamente recomendada.
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