Road to Perdition (Camino a la Perdición) es una película dirigida por Sam Mendes, realizador de la exitosa y multipremiada American Beauty (Belleza Americana) y es protagonizada por Tom Hanks, Paul Newman, Jude Law, Daniel Craig y Stanley Tucci. Estrenada en 2002, está basada en la novela gráfica del mismo nombre, escrita por Max Alan Collins e ilustrada por Richard Piers Rayner, publicada por Paradox Press en 1998.
Collins es un afamado escritor de misterio y detectives, relacionado con los cómics desde hace casi 30 años pero más enfocado a su carrera como autor de prosa. Escritor de las tiras cómicas de Dick Tracy desde el retiro de Chester Gould, Collins fue poco a poco haciéndose de una reputación en el medio, siendo tal vez los puntos más altos de su carrera en los cómics su periodo como escritor regular de Batman, entre 1987 y 1988, y la aparición de Road to Perdition, diez años después.
Road to Perdition cuenta la historia de Michael Sullivan, un matón de la mafia durante los años de la prohibición cuya familia es asesinada por su propio jefe luego de que el mayor de sus dos hijos presenció una ejecución. Sullivan sobrevive el ataque y junto con su hijo emprende la huida de quien alguna vez fuera su empleador, John Rooney, al tiempo que desata una guerra personal mientras trata de vengar la muerte de su familia. El personaje de Rooney está basado en el mafioso de la vida real, John Looney, cuyo nombre fue cambiado únicamente para la versión fílmica de la historia.
Collins ha reconocido en más de una ocasión que la novela fue escrita como un homenaje al legendario manga Kozure Okami, conocido en occidente como Lone Wolf and Cub, obra de Kazuo Koike y Goseki Kojima (que también ha sido llevada al cine), pero afirma que la principal inspiración para escribirla fue un hecho de la vida real, pues Looney realmente traicionó a uno de sus matones y provocó un conflicto en el bajo mundo de Chicago.
En cuanto a la película, la historia filmada por Mendes difiere en varios aspectos de aquella que fue presentada en la novela gráfica unos años antes, aunque la trama en términos generales es la misma.
Además del cambio de nombre de la familia Looney por Rooney, se crea un personaje adicional, Harlen Maguire (interpretado por Jude Law) para que sirva como contraparte a Sullivan (Tom Hanks), y aunque la interpretación de Law es sobresaliente, la existencia de su personaje altera drásticamente el tono de la historia. Maguire tiene la costumbre de retratar a sus víctimas instantes después de matarlas y colecciona las fotos. Esa peculiar actividad me recuerda al personaje que interpretó Wes Bentley en American Beauty, donde utilizaba una videocámara para registrar esa clase de "momentos especiales".
Luego del éxito comercial y de crítica de la película, Collins escribió On the Road to Perdition, una miniserie de tres partes que llena algunos de los huecos dentro de la historia original. Posteriormente publicó también tres secuelas a la historia, aunque ninguna de ellas recibió el aclamo de la crítica ni la aceptación de los fans, por lo que es muy poco probable que pudiesen realizarse adaptaciones a la pantalla de alguna de ellas.
Personalmente prefiero la novela gráfica a la película, pues ésta se siente demasiado lenta y a veces incluso aburrida. Me parece que la selección de Hanks para el protagónico fue un error, pues Michael Sullivan es un personaje que poco o nada tiene que ver con los papeles que Hanks acostumbra tomar.
Tengo entendido que muchas de las escenas más violentas de la película fueron eliminadas o suavizadas a petición de Hanks y de Conrad Hall, el cinematógrafo de la película, pues ambos sienten un peculiar desagrado por la violencia, pero ninguna de esas escenas parece haber sido reemplazada por alguna escena de peso emocional que impidiese que la película perdiera fuerza. El tema de padres e hijos tiene un papel muy importante en la historia, pero es manejado de una manera muy superficial y estática.
Visualmente no existe queja alguna. El trabajo de fotografía y la recreación de la época son extraordinarios. Mendes tiene gran talento para construir sus composiciones de forma muy atractiva a la vista, pero no tiene la habilidad para usar ese talento como una herramienta narrativa, lo que resulta en el ritmo semilento de la película. Las actuaciones, más allá del problema con Hanks, son impecables. Newman ofrece uno de sus trabajos más sobrios, en tanto que Jude Law y Daniel Craig (que interpreta a Connor, el psicótico hijo de Rooney) lo hacen tan bien que el espectador sólo puede desear que Sullivan hubiese sido interpretado por algún actor a la altura de sus co-protagonistas.
En resumen, Road to Perdition es una muy buena historia de mafiosos, donde las relaciones de familia y el honor juegan un papel muy importante. Yo prefiero la novela gráfica, pero invito a todos a que la lean, vean la película y formen su propia opinión. Y si les gusta o no, o tienen algo que compartir y están de humor para discutir el tema, ¿por qué no lo hacemos en la sección de comentarios?
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