Ahora sí, el segundo volumen de la saga de Los Reyes Malditos, de Maurice Druon. Digo que ahora sí porque, como expliqué hace semanas, por error leí el quinto libro de la serie cuando apenas había leído el primero.
Por un lado, Carlos de Valois, hermano de Felipe El Hermoso y tío de Luis X, quiere regresar a Francia a las viejas costumbres que otorgaban toda clase de privilegios a los nobles y señores feudales sin importar el impacto de ello.
Por el otro, Enguerrando de Marigny, quien fungió como administrador real durante el reinado de Felipe El Hermoso, considera que es mejor mantener el estricto control del país y conservar el régimen de trabajo que tanto éxito le dio junto al difunto monarca.
Complicando aún más el difícil entorno de la corte, está la situación marital del rey, pues su esposa, Margarita de Borgoña, fue encarcelada en un viejo castillo y acusada de adulterio. El rey desea volver a casarse, pero primero debe convencer a su mujer de firmar una confesión donde diga que su matrimonio nunca se consumó, lo que sería suficiente para conseguir la anulación de su unión.
Las alianzas, intrigas y traiciones en la corte se venden, cambian y negocian para beneplácito de todos los involucrados, especialmente de los banqueros italianos, quienes cada día adquieren más poder gracias a los nobles que están en deuda con ellos. Conforme avanza el tiempo y se acerca el plazo fijado por la corte de Hungría para anunciar el compromiso del rey, se hace evidente que sólo un crimen podrá liberar al monarca de su actual unión...
Maurice Druon logra algo digno de elogiar con su novelización de la historia de la corte francesa, pues no sólo hace un completo recuento de los hechos históricos de esos años, sino que los contextualiza de forma muy humana y convierte a sus protagonistas, que en los libros de historia suelen ser presentados como figuras de cartón poca definidas, en personajes complejos y creíbles, con virtudes, defectos, ambiciones y pasiones que los llevan a realizar acciones de gran peso en el desarrollo de uno de los países económica y políticamente más importantes de la Europa medieval.
En particular me gusta cómo va integrando la historia de personajes menores a la historia más grande en proceso, como es el caso de Guccio, sobrino del jefe de los banqueros lombardos, quien cada vez ocupan un lugar más importante tras los círculos de poder en que trabajar para su tío lo ha involucrado. Ya le di un vistazo a su futuro y sé que su importancia crecerá con el avance la serie. Si les gusta la historia, sería un error no leer alguna vez ésta excelente obra de ficción histórica, e incluso si se trata de una materia que consideraban aburrida en la escuela, apuesto a que el trabajo de Druon en Los Reyes Malditos puede ayudar a cambiar radicalmente su opinión al respecto.Recomendada sin pero alguno.
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