Si existe un superhéroe al que se identifica como defensor de los débiles y campeón de los ideales de igualdad y justicia, sin duda se trata de Superman. Desde su concepción, el Hombre de Acero se caracterizó por tratarse de un personaje que, pese a tener poderes que lo ponen al nivel de un dios, es tan humano como cualquiera.
Al paso de los años, aunque la personalidad e ideales del personaje se han mantenido prácticamente sin cambios, el enfoque de sus historias se fue alejando de lidiar con esos problemas mundanos en busca de presentar ideas más espectaculares que pudieran atraer la atención de los lectores, tratando de crear la clase de situaciones que permitieran aprovechar al máximo el potencial de los increíbles poderes del último hijo de Krypton.
Quizás por eso resultó tan refrescante encontrarme con que Superman Smashes the Klan es la clase de historia que voltea hacia el pasado en más de un sentido.
Escrita por Gene Luen Yang y con arte del tandem japonés conocido como Gurihiru, se trata de una miniserie de tres números que nos recuerda por qué Superman es un personaje ideal para usar en narraciones aptas para lectores de todas las edades. La historia está basada en un arco del popular serial radiofónico de los años cuarenta The Adventures of Superman que lleva por título Clan of the Fiery Cross (El Clan de la cruz de fuego), emitido en 1946 y el cual tiene detrás una historia propia (aquí pueden escuchar el primer episodio, en inglés, claro).
En esa aventura Superman enfrentaba las racistas maquinaciones del Ku Klux Klan, y la historia resultó tan popular que tuvo repercusiones en el mundo real. Con sus actividades expuestas y avergonzadas por el héroe de uno de los dramas radiofónicos más populares de la época, el Klan no sólo tuvo problemas para reclutar nuevos miembros, sino que se estima que en las semanas posteriores a la emisión perdió a muchos integrantes.
Aunque a lo largo de los años muchas ideas e historias del serial de radio hallaron el camino para aparecer también en los cómics del héroe, Superman Smashes the Klan representa la primera vez que esta historia en particular ha sido adaptada a cómic.
El resultado es tan emotivo como divertido, e incluso podríamos calificarlo, hasta cierto punto, como algo un tanto educativo, pues más allá de lo que concierne a las aventuras del campeón de Metrópolis, la historia muestra situaciones históricamente correctas de la vida en algunas ciudades durante la época en que se desarrolla la historia.
La versión de Yang nos muestra a un joven Superman que enfrenta un preocupante brote de racismo en su ciudad, al tiempo que sigue aprendiendo a usar sus poderes e intenta abrazar su identidad como alienígena. La trama transcurre en 1946 y sigue a la familia Lee, que acaba de mudarse del Barrio Chino a los suburbios de Metrópolis.
El padre, el Dr. Lee, tiene un nuevo trabajo en el Departamento de Salud de Metrópolis y está ansioso por empezar, pero el proceso de adaptación es muy diferente para sus hijos adolescentes Tommy y Roberta. Tommy es de carácter relajado y extrovertido, por lo que no tiene problemas para hacer amigos en su nuevo vecindario casi de inmediato.
Por otro lado, su hermanita Roberta es tímida e introvertida, y se siente incómoda y fuera de lugar después de la mudanza. Lo única en que ambos están de acuerdo es en lo mucho que les emociona la posibilidad de conocer a Superman ahora que viven más cerca de donde éste opera. Pero el proceso de transición a un nuevo vecindario, escuela y amigos se ve complicado cuando entra en escena el capítulo local del Clan de la Cruz en Llamas, una clara alegoría al infame Klan, quienes están furiosos ante esta nueva invasión de "sucios e impuros inmigrantes" a un vecindario que consideran suyo por derecho.
El aclamado escritor ganador del Eisner Gene Luen Yang era la persona ideal para adaptar esta historia, y hace un gran trabajo al retratar las dificultades de crecer como parte de una minoría racial en una ciudad de los Estados Unidos. Además, pese a lo delicado del tema, lo hace sin que la historia se vuelva demasiado compleja, y la adereza con una buena dosis de humor y diálogos que reflejan la inocencia de la época en que transcurre el relato.
El detalle de enmarcar la historia en el momento en que el joven e inexperto Superman apenas está descubriendo los detalles acerca de su pasado y se ve forzado a lidiar con las emociones que le provoca la revelación, enriquece la experiencia de lectura de una forma especialmente humana y conmovedora.
Su estilo, con su aparente simpleza de trazo, dinámicas poses que indican movimiento y gran rango de expresiones faciales nos hace pensar de inmediato en una animación, y parece ideal para una historia de este tipo. La combinación de trazo limpio y colores vibrantes que caracteriza el trabajo de estas artistas le sienta muy bien a Superman, y es algo que hace de la lectura una experiencia visual más que agradable.
En resumen, Superman Smashes the Klan es una emotiva y entretenida historia que hará las delicias de los fans del Hombre de Acero, pues despliega muchas de las mejores características del personaje. Y si ustedes son de los que creen que la personalidad misma de Superman es el principal obstáculo para que sus historias sean atractivas o interesantes, creo que deberían echarle un vistazo a esta historia que ya pronto estará disponible también en un tomo compilatorio. Puede que se lleven una sorpresa.
Datos de Trivia
¿Sabían ustedes que elementos icónicos de la mitología de Superman, como la kryptonita, o personajes como Jimmy Olsen y el editor del Daily Planet, Perry White, aparecieron en el serial radiofónico antes que en los cómics? Y lo mismo pasó con la frase "¡Arriba, en el cielo! ¡Es un pájaro! ¡Es un avión! ¡Es Superman!”
No hay comentarios.:
Publicar un comentario