NFL 2008: Super Bowl XLIII

Llegó el día. La temporada 2008 de la NFL termina el día de hoy con el Super Bowl XLIII, donde se enfrentan los Acereros de Pittsburgh y los Cardenales de Arizona en Tampa Bay, Forida.

Cada año el Super Bowl se convierte en uno de los eventos mediáticos y televisivos del año, pues no hay nada que se le compare en términos de cobertura e interés. Los spots publicitarios durante la transmisión del juego son los más caros y buscados de la televisión mundial y año con año se establecen récords de audiencia. Y sin embargo, es sólo un juego.

Cierto, se trata del juego más importante del año, donde se decide al campeón de la NFL, un juego alrededor del que se mueve muchísimo dinero en patrocinios, merchandise y apuestas, pero no por ello deja de ser un juego. Hay que recordar que a pesar de su enorme popularidad alrededor del mundo, la NFL no es tan relevante como, digamos, el Mundial de Fútbol o los Juegos Olímpicos, y que sin importar la atención generada, sigue siendo un encuentro entre dos equipos, con once jugadores por bando en el terreno de juego disputando el campeonato de la NFL. Así que, hablando del juego, mis dos centavos...

Los Cardenales de Arizona fueron el acabose de mis pronósticos en los playoffs, pues ganaron todos sus juegos y yo los había puesto en el papel de víctimas. Cuando derrotaron a los Halcones muchos pensamos que había sido un accidente, un juego planteado diferente por su entrenador en jefe, quien dio un papel importante a su juego terrestre, relegado a segundo plano toda la temporada.

Además, la ejecución de su defensiva mejoró notablemente. Luego vino el juego contra las Panteras de Carolina, y es necesario apuntar que más que una victoria de los Cardenales fue uno de los más claros casos de auto-destrucción de un equipo que se haya visto en mucho tiempo. La ofensiva de las Panteras cometió muchos errores y regaló la posesión del balón demasiadas veces, y al irse abajo en el marcador tuvieron que abandonar el ataque terrestre, pieza fundamental de su juego a lo largo del año.

Pero el juego de campeonato de la NFC fue diferente. Las Águilas de Filadelfia dieron un decepcionante primer medio y los Cardenales parecían encaminados a una fácil victoria para ganar su boleto al Super Bowl, pero los ajustes de los coaches de las Águilas al medio tiempo fueron efectivos y neutralizaron a los Cardenales tanto en ataque como en defensiva, remontaron el marcador y tomaron control del juego. Los Cardenales sólo montaron una buena serie ofensiva y sacaron puntos en el segundo medio, pero bastó para sacar la victoria. Sólo queda preguntarse que hubiese pasado si hubiera quedado un poco más de tiempo, o si las Águilas hubieran empezado sus ajustes de antes del descanso.

Los Acereros de Pittsburgh tuvieron un camino muy distinto rumbo al gran juego. Como campeones de división y gracias a su marca en temporada regular, descansaron la primera semana de playoffs. En la ronda divisional enfrentaron a los enrachados Cargadores de San Diego y dieron una muestra de por qué su defensiva era considerada la mejor de la liga.

Su ataque se mostró fuerte y sólido, y fue importante contar con un Willie Parker saludable para la notoria mejoría que su ofensiva mostró respecto a la temporada regular. En el juego de campeonato de la AFC enfrentaron a sus rivales de división, los Cuervos de Baltimore, y los derrotaron por tercera ocasión en la temporada en un memorable enfrentamiento entre las dos mejores defensivas de la liga.

Así que para el día de hoy me inclino a favor de los Acereros basado en dos factores: la experiencia que tienen los más de veinte jugadores que participaron en el Super Bowl XL, y el desempeño de su defensiva. Solo seis jugadores de los Cardenales han jugado en un Super Bowl y fue con diferentes equipos, así que el manejo de la presión puede ser un factor importante. Sea como sea, espero sea un entretenido juego que no se cargará hacia ningún lado al menos durante el primer medio.

Por último, algunas curiosidades:

• Cada vez que los Acereros han enfrentado en el Super Bowl a un equipo debutante han conseguido la victoria.
• Es la tercera vez que los Acereros disputan un Super Bowl en Florida. Ganaron los otros dos.
• Ken Whisenhunt, entrenador en jefe de los Cardenales, era el coordinador ofensivo de los Acereros en el Super Bowl XL. Era candidato a reemplazar a Bill Cowhers, pero los dueños del equipo prefirieron a Mike Tomlin.
• En 1944 los Acereros de Pittsburgh y los Cardenales de Chicago se integraron en un solo equipo para lidiar con la ausencia de jugadores que cumplían su servicio militar durante la Segunda Guerra Mundial.