The Devil All the Time es un thriller psicológico basado en la novela del mismo nombre, obra de Donald Ray Pollock. La adaptación fue escrita por Antonio y Paulo Campos y dirigida por el primero, y cuenta con un elenco que incluye a Tom Holland, Bill Skarsgård, Robert Pattinson, Sebastian Stan, Riley Keough, Jason Clarke, Haley Bennett, Eliza Scanlen y Mia Wasikowska. La película se estrenó a través de Netflix el pasado 16 de septiembre.
Emma Russell, madre de Willard, se hizo cargo de Helen Hatton (Wasikowska), una joven huérfana a quien esperaba emparejar con su hijo, pero no resultó. Helen se casó con Roy Laferty (Harry Melling), un fanático predicador religioso, y tuvieron una hija llamada Lenora. Cuando ocurre una tragedia, Lenora es adoptada por Emma y criada como su propia hija. Pocos años después, Charlotte y Willard fallecen de manera trágica, y Arvin es enviado a casa de Emma, donde es criado como hermano de Lenora.
Arvin (Holland) se convierte en un joven adulto que hace todo lo posible por proteger a Lenora (Scanlen) de otros muchachos mientras ayuda a su abuela a mantener la casa. La llegada al pueblo del reverendo Preston Teagardin (Pattinson), un joven predicador que reemplaza al párroco anterior, pone las cosas de cabeza, y su peculiar conducta con los feligreses, en particular las mujeres jóvenes, desencadena una serie de trágicos y violentos sucesos.
Otra trama paralela que se cruza en más de una ocasión con las vidas de los Russell sigue a Sandy (Keough) y Carl Henderson (Clarke), una pareja de asesinos seriales con un fetiche por la fotografía, y otra más gira alrededor del ambicioso y corrupto sheriff Lee Bodecker (Stan), quien también tiene un par de encuentros con los Russell a lo largo de los años.
Lo más destacado de la película son las actuaciones. Holland, Pattinson, Skarsgård y Stan interpretan papeles que se alejan de aquellos que los han hecho populares y se convierten en el soporte principal de una película con muchos problemas de ritmo, y probablemente son la razón de que la mayor parte del tiempo la historia funcione y pueda mantener la atención del espectador. Holland en particular logra dar sutiles matices a la personalidad de Arvin que ayudan a que sea fácil empatizar con él pese a lo inusual de su entorno y circunstancias.
La historia tiene tintes de neo noir y explora temas de religión, maldad y abuso de poder, situaciones que en algunas áreas rurales de los Estados Unidos parecen ir de la mano. No he leído la novela de Pollock, pero imagino que explora esos temas con algo más de compromiso que la adaptación realizada por los Campos, que parecen temerosos de abrazar de lleno el tono noir de la historia, que probablemente habría dado a la historia una mayor profundidad, lo que a su vez hubiera atendido el problema del ritmo semilento que se convierte en el principal problema de la película.
Nunca he visto nada que haya dirigido Antonio Campos, salvo por un episodio de la serie de The Punisher, también producida por Netflix, pero basado sólo en eso me inclino a pensar que el problema de ritmo que aqueja a esta película viene del guion, que en un intento por conservar la mayor parte del argumento de la novela no logra inyectar a la historia las suficientes inflexiones para mantener la fluidez narrativa.
The Devil All the Time es una interesante película cuyas imperfecciones me hacen querer buscar la novela, pero a pesar de sus problemas resulta una experiencia mayormente gratificante para la audiencia, en buena medida gracias al excelente trabajo de sus intérpretes. Recomendada, pero con bastantes reservas.
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