Con Trollhunter, película que se estrenó en nuestro país con el reducido título de Trol, ocurrió algo muy similar a lo que había pasado hace unas semanas con Monsters (Monstruos: Zona infectada), en el sentido que se trata de otra película independiente que gracias a su éxito en festivales internacionales se hizo de cierto nombre, pero que jamás hubiese imaginado que una distribuidora se decidiera a lanzar un volado y traerla para su exhibición en México.
No tengo idea de qué haya convencido a las distribuidoras de dar una oportunidad a estas películas, pero espero que lo sigan haciendo y no se limiten sólo a películas de género o a aquellas que empiezan a volverse "de culto", e incluyan más cine independiente del circuito de festivales.