Justo después de comentar la poca presencia de directoras en el cine, me encuentro con la sorpresa de que An Education (Una Enseñanza de Vida), película que me llamó la atención primero por su guionista (Nick Hornby), y después por sus nominaciones al Oscar, fue dirigida por una mujer, la danesa Lone Scherfig, de quien debo confesar no sé nada. Una rápida búsqueda en la web me informa que ésta es su segunda producción en inglés, segunda realizada fuera de su natal Dinamarca, y que fue parte del movimiento conocido como Dogma95 a finales de la década de 1990.
An Education está basada en una memoria escrita por Lynn Barber y cuenta la historia de Jenny (Carey Mulligan), una joven británica de clase media que vive en los suburbios de Londres a inicios de los 1960, asiste a una escuela para señoritas, y sueña y se esfuerza para asistir a la prestigiada Universidad de Oxford.
Sus padres (Alfred Molina y Cara Seymour) la apoyan e incluso presionan para que alcance ese objetivo. Sus planes son alterados cuando conoce a David (Peter Sarsgaard), un hombre que casi le dobla la edad pero con quien comparte la afición por el arte, la música clásica y todo lo relacionado con París.
Armado sólo con su carisma y una habilidad verbal que sería la envidia de cualquier vendedor, David se gana poco a poco la confianza de los padres de Jenny, que acceden a que la lleve a recitales de música clásica e incluso a un viaje de fin de semana a Oxford. Sin embargo, David no es lo que parece, pues tras su apariencia de acaudalado playboy y socialité se esconde una persona de escrúpulos cuestionables y cuya forma de vida es sostenida mediante tratos comerciales que no son para presumir.
Acompañados casi siempre por Helen y Danny (Rosamund Pike y Dominic Cooper), una pareja de amigos de David, Jenny descubre todo un mundo que su conservadora forma de vida no le había permitido siquiera vislumbrar.
El cambio en la perspectiva de Jenny es tan radical que en unos cuantos días decide que la educación formal y cualquier satisfacción que pudiese obtener por asistir a un colegio tan afamado como Oxford pueden estar sobrevalorados, y llega al extremo de abandonar la escuela y todos sus sueños en aras de seguir con esa aparente vida de ensueño al lado de David, quien le propone matrimonio.
Desafortunadamente para Jenny, la realidad regresa para golpearla de lleno en la cara y llevándola a reevaluar lo que desea hacer con su vida.
An Education es una pieza de conjunto, pues aunque todo gira en torno a Jenny, interpretada de forma asombrosa por Mulligan, quien no en vano se ha ganado el reconocimiento de la crítica y varias nominaciones a distintos premios, el sutil trabajo de caracterización logrado por Scherfig de la mano del guion de Hornby es lo que separa a esta película de muchos dramas con temáticas similares. El elenco, compuesto por una mezcla de actores jóvenes y veteranos, está lleno de actores, no de estrellas, y a los ya mencionados hay que agregar a Olivia Williams y Emma Thompson en papeles de soporte.
El resultado final es una entrañable película sobre sueños y aspiraciones, aderezada con ciertos toques de comedia romántica y el suficiente drama de costumbres como para pensar en ella como una historia de Jane Austen magistralmente adaptada a la época contemporánea.
En cuanto a sus posibilidades este domingo en los Premios de la Academia... bueno, creo que va siendo hora de poner algún post de pronósticos que no sean de la NFL, ¿no? Que mejor que este domingo, entonces, para publicar mi primera quiniela de los Oscar. Hasta entonces.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario