Hace muchos años que por regla general evito ver en el cine películas dobladas al español. Por desgracia hay ocasiones en las que esa decisión significa que hay películas que no puedo ver en el cine y debo esperar hasta su aparición en DVD, sobre todo cuando se trata de cintas animadas.
Entiendo que a las distribuidoras les resulta más atractivo llenar una sala con niños (quienes casi forzosamente llevarán a sus padres) que atender a un posible público adulto, me parece que hay películas (Toy Story, Shrek) que han demostrado que existe suficiente público interesado en disfrutar las películas animadas en su idioma original.
Mi problema con ver películas dobladas no tiene que ver con que el doblaje sea malo o que no tengamos una industria de doblaje capaz de hacer buen trabajo, pues no es el caso. Mi recelo tiene que ver con dos grandes problemas relacionados con la industria: 1) Las malas traducciones (que también se dan en las películas subtituladas), y 2) La necedad de incluir "celebridades" locales en el doblaje sólo con fines promocionales. Ése parece haber sido el caso con Megamind (Megamente), porque no hay otro modo de explicar la inclusión de Ludwika Paleta y Marco Antonio Regil en el reparto de voces.
Mi problema con ver películas dobladas no tiene que ver con que el doblaje sea malo o que no tengamos una industria de doblaje capaz de hacer buen trabajo, pues no es el caso. Mi recelo tiene que ver con dos grandes problemas relacionados con la industria: 1) Las malas traducciones (que también se dan en las películas subtituladas), y 2) La necedad de incluir "celebridades" locales en el doblaje sólo con fines promocionales. Ése parece haber sido el caso con Megamind (Megamente), porque no hay otro modo de explicar la inclusión de Ludwika Paleta y Marco Antonio Regil en el reparto de voces.
Megamind es una historia de héroes y villanos con ciertos tintes de parodia/homenaje al género de superhéroes, aunque por fortuna estos no llegan nunca a convertirse en la parte dominante de la historia. Metrocity es una ciudad quede desde hace muchos años es protegida por Metro Man (Regil) el héroe más grande del mundo, quien ha dedicado su vida a detener los malévolos planes de su archienemigo, Megamente (Juan Alfonso Carralero), genio criminal que a pesar de todo su intelecto nunca ha logrado nada.
Durante la inaguración del Museo de Metro Man, Megamente secuestra a Roxanne Ritchi (Paleta), una atractiva y energética reportera de televisión a quien el público suele ligar sentimentalmente con Metro Man. Roxanne se muestra desdeñosa de las amenazas de Megamente, pues parece que se trata de una rutina repetida en incontables ocasiones a lo largo de los años: Megamente secuestra a Roxanne y prepara una trampa para Metro Man, éste escapa, rescata a Roxanne y lleva a Megamente a prisión. Fin.
Pero esta vez no es así, pues un detalle inesperado altera el curso de eventos con un desenlace sorprendente. La trampa ha funcionado y Metro Man está muerto, dejando a Metrocity a merced de Megamente. Pero, ¿qué motiva a un villano a seguir adelante cuando carece de metas por conquistar? ¿cómo puede un genio criminal mantenerse en forma sin un antagonista?
Megamente decide que hace falta un héroe que lo enfrente para poder disfrutar al cometer fechorías, y concluye que, si Metrocity no puede producirse un nuevo héroe, él tendrá que hacerlo por ellos. Usando los restos del uniforme de Metro Man para obtener muestras de ADN, Megamente planea convertir a un ciudadano común en alguien con poderes como los de Metro Man. Mientras trabaja en su proyecto para crear un nuevo héroe, se ve forzado a pasar un tiempo como Bernard, un empleado del museo, y bajo ese disfraz comienza una relación con Roxanne, que poco a poco se convierte en un romance.
Por fin crea el suero que dará origen a un nuevo héroe, pero debe lidiar con la presión de seguir mintiendo a Roxanne, y se distancia de su fiel e inseparable asistente, Servil (Luis Alfonso Mendoza), Por accidente le da poderes a Hal Stewart, el tonto e irresponsable camarógrafo de Roxanne, que siempre ha tenido un crush con ella. Lo entrena y prepara para su debut como héroe, pero las cosas se salen de control y Tighten, el presunto nuevo héroe de Metrocity, se convierte en el mayor villano que la ciudad haya enfrentado. ¿Podrá la mente más grande del mundo encontrar su verdadera vocación, y demostrar al mundo que el villano puede quedarse con la chica?
Megamind fue dirigida por Tom McGrath, quien anteriormente sólo había dirigido las dos entregas de Madagascar, y parece ser que tuvo algunos problemas con el resultado final de la película, lo que llevó a la contratación de algunos asesores, incluyendo a Guillermo del Toro, para reeditar la película y hacerla más emocionante y entretenida. El resultado es una divertida película con una historia ligeramente más compleja de lo que uno esperaría y que deja la sensación de que con un poco de trabajo pudo haber llegado a ser algo digno de admiración y respeto.
Mi queja con las celebridades que pretenden ser actores se justifica una vez más al notar la abismal diferencia entre el trabajo de los "artistas" mencionados y el de dos auténticas leyendas del doblaje en México, Juan Alfonso Carralero y Luis Alfonso Mendoza, quienes hacen un extraordinario trabajo dando vida a Megamente y Servil. Para quienes llevan notas, las voces originales corrían a cargo de Will Ferrell (MegaMind), Tina Fey (Roxanne Ritchi), Jonah Hill (Tighten), Brad Pitt (Metro Man) y David Cross (Servil), además de pequeñas participaciones de Ben Stiller, Justin Theroux y J.K. Simmons.
A pesar de ello cumple a la perfección como entretenimiento y puedo afirmar que fue una de las mejores opciones de entretenimiento durante los últimos días del 2010 y primeros del 2011.
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