Ha pasado más de un mes desde la última vez que escribí en este blog. Por motivos personales me encontraba en un estado de ánimo que me parecía poco adecuado para escribir algo que compartir. A juzgar por el último post de Santiago no soy el único que no se siente precisamente bien. Pero creo que un blog con tres colaboradores y sólo dos entradas en un mes no es deseable, así que decidí volver antes de sentirme mejor. Después de todo, yo inicié este blog y supongo que eso me da una cierta responsabilidad.
A fin de no entrar en temas particularmente escabrosos haré un breve recuento de algunas películas y libros así como de algunas notas periodísticas con las que me topé en las últimas semanas. Para empezar, una nota retorcidamente curiosa. No había visto la noticia en ninguna parte, pero de acuerdo con esta nota del Orlando Sentinel, Michael Chartrand, un empleado de 36 años de Disney World, fue arrestando.
Ayer me encontré en Milenio una breve nota (no puede leer en línea a menos que paguen una suscripción, pero aquí está la nota de la agencia UPI) en la que se menciona que abogados y representantes de Disney quieren evitar que se utilice el traje de Tigger en el juicio.
Una de sus propuestas era teñir el traje de blanco o de negro o bien removerle las orejas. Jeffrey Kaufman, abogado de Chartrand, y quien también llegó a trabajar como botarguero en el mismo parque, se negó a la solicitud, alegando que alterar el disfraz "puede satanizar a mi cliente e impedirme demostrar CUAN DIFICIL ES MANOSEAR A ALGUIEN MIENTRAS SE ESTA DISFRAZADO DE TIGGER" Sin comentarios.
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