En las mismas frecuencias donde se transmite De Una a Tres, que recién comenté, pasa también La Red, de Cinco a Nueve, emisión conducida por Guadalupe Juárez y Jorge Berry, y es un programa bastante disparejo. Por momentos la interacción entre sus locutores es de gran nivel, recordando a los mejores momentos de la mancuerna Solórzano - Aristegui, pero a veces no hay forma de que hagan fluir el programa. Poco ayuda que Berry se ausente del programa cada tercer día. Pero lo que realmente impide que el innecesariamente largo programa fluya son sus secciones complementarias.
Los deportes, a cargo de Ricardo Mar, son sólo una sucesión de notas sin orden o estructura, con comentarios tendenciosos de Mar y sus corresponsales, y una evidente falta de conocimiento de algunos deportes de parte de los responsables de la sección, arbitrariamente dividida en tres partes a lo largo del programa, hacen de ella un enorme desperdicio de tiempo al aire. Por último, los espectáculos. ¿Es necesario que un noticiero tenga una sección de veinte minutos de espectáculos? O peor aún, ¿una sección de chismes y notas sin sentido disfrazada de sección de espectáculos?
Yo creo que no. Pero Joanna Vega dedica su sección a hablar de la vida personal de "celebridades" de la farándula nacional. Con una dicción de pena ajena, un afán de mostrar su falta de cultura general y una tendencia a reportar cualquier rumor sobre cine o televisión como noticia, la señorita Vega parece más a gusto cuando habla de los más recientes chismes sobre las estrellas de telenovela o los ex-integrantes de Big Brother. Entre ambas secciones llenan de paja casi una hora.
Para rematar, el día de ayer fue penoso. Con bombo y platillo Berry anunció una entrevista exclusiva de una hora con el jefe de gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador. Se suponía que iban a dedicar media hora a hablar sobre el proceso de desafuero y el supuesto complot, y la otra media hora a hablar sobre la problemática de la ciudad. Pero no fue así. La primera media hora le cedieron el micrófono a López para que expusiera su versión en el asunto del proceso de desafuero sin siquiera cuestionarlo. Y en la segunda mitad fue un espacio para que enumerara el trabajo que realiza.
Por si fuera poco, quince minutos antes de finalizar la entrevista, recibieron una llamada de Francisco Uribe, ejecutivo de Grupo Radio Centro, quien cedió la palabra a Juan Francisco Ealy Ortíz, director de El Universal. Ealy sirvió de palero a AMLO, haciéndole preguntas diseñadas para el lucimiento del jefe de gobierno. De verdad penoso, sin mencionar que además irresponsable por tratarse de un noticiero nacional. Por un momentos incluso pensé que era la primera emisión de Andrés Manuel Contigo, Andrés Manuel en Vivo. Justo cuando creíamos que la Era del Chayote había quedado atrás.
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