Bettie Mae Page, la famosa modelo estadounidense considerada un ícono de la cultura popular contemporánea y uno de los símbolos sexuales más importantes del siglo XX, falleció la tarde de ayer a los 85 años de edad.
Nacida en 1923 en Nashville, Tennessee, Bettie se casó en 1943 con un compañero de la prepa, con quien vivió en distintas ciudades, incluyendo Port-au-Prince, Haiti. En 1947 se divorció y un par de años más tarde se mudó a Nueva York, donde esperaba iniciar una carrera como actriz. En 1950 conoció a Jerry Tibbs, un oficial de policía aficionado a la fotografía, y el le ayudó a armar su primer portafolio.
En unos cuantos meses Bettie se convirtió en una de las modelos más populares entre fotógrafos aficionados y semi-profesionales que conformaban la industria erótica local. Durante la década de los 1950 colaboró con el fotógrafo Irving Klaw en la creación de sets fotográficos sobre pedido. A ese periodo pertenecen algunas de sus imágenes más famosas, especialmente las controvertidas imágenes fetichistas y de sadomasoquismo.
En 1954 conoció en Florida a la fotógrafa Bunny Yeager, quien se encargo de realizar, entre otras, la sesión fotográfica conocida como Jungle Bettie, donde aparece vistiendo un bikini de leopardo y modela junto a varios animales. Yeager también tomó la famosa foto que Hugh Hefner elegiría para el centerfold del número de enero de 1955 de Playboy, para el cual Bettie fue designada como Playmate del Mes.
En 1957 hubo una investigación especial del Subcomité del Senado contra la Delincuencia Juvenil, lo que combinado con su conversión al cristianismo en 1959 acabó con la carrera de modelaje de Page.
Durante la década de los 1980, mientras Page era tratada por esquizofrenia en una institución especializada del gobierno, se dio un resurgimiento de su imagen en la cultura popular tras la aparición de varios libros y colecciones de fotos a finales de la década anterior. Dave Stevens, creador de The Rocketeer, modeló a uno de sus personajes detrás de Bettie (para el cine el personaje se suavizó y se le cambió el nombre), y años más tarde tuvo oportunidad de conocerla y ayudarle a registrar su nombre e imagen como marcas comerciales que generaran los ingresos necesarios para sostenerse.
La semana pasada Page sufrió un ataque cardiaco y fue hospitalizada en Los Angeles, California. Aparentemente nunca recuperó la conciencia y la tarde de ayer su familia decidió que era hora de dejarla partir.
Descanse en paz.
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