Luego de ver (500) Days of Summer y en el proceso de darle a mi hermano antecedentes de Zooey Deschanel, saqué mi DVD de The Hitchhiker's Guide to the Galaxy (La Guía del Viajero Intergaláctico), adaptación al cine del clásico humorístico de ciencia ficción escrito por Douglas Adams, y es una película tan divertida que no me aguanté las ganas de volver a verla.
El libro mismo es una adaptación del radiodrama que el propio Adams escribió para la BBC, que también lo adaptó como serie de TV. Ambas versiones son muy populares en Gran Bretaña pero difíciles de hallar fuera de ahí.
La idea de llevarlo también al cine tenía varios años en preparación, y el mismo Adams se involucró como productor y guionista. Cuando Adams falleció en 2001 se temía que el proyecto pudiese venirse abajo pero afortunadamente no fue así. Se completó el guión y la película se filmó en el 2004, siendo estrenada alrededor del mundo al año siguiente. En México tuvo el tradicional trato que reciben las producciones que no vienen de un gran estudio hollywoodense o cuentan con estrellas de tabloide: una semana en exhibición en locaciones "selectas".
El director de la película fue Garth Jennings, quien suele trabajar bajo el pseudónimo de Hammer & Tongs junto con su productor, Nick Goldsmith, quien también ocupó ese rol en esta película. Se trató de su debut en cine, pues hasta entonces ambos eran mayormente reconocidos por su trabajo en anuncios publicitarios y en videos musicales, particularmente para bandas británicas como Pulp, Eels, Supergrass o Blur. Me atrevería a asegurar que todo mundo conoce al menos uno de sus videos, pues el dúo es responsable del de Coffee & TV, de Blur, popularmente conocido como "el de la lechita".
Arthur Dent (Martin Freeman) es un inglés que despierta una mañana para descubrir que su casa está a punto de ser demolida y sale a tratar de impedirlo, tirándose frente a las máquinas para impedir que lleven a cabo su tarea. Aparece Ford (Mos Def), su mejor amigo, que lo convence de que es cuestión de vida o muerte que lo acompañe al bar a tomar unas cervezas pues el mundo está a punto de llegar a su fin. Arthur lo sigue sin entender por qué. Ford intenta convencerlo de que en realidad es un extraterrestre que se quedó varado en la Tierra hace años, y que es imperativo que consigan un "aventón" antes de que sea tarde.
Arthur cree que se trata de una broma de mal gusto hasta que en el cielo aparecen las enormes naves de los Vogones, mismas que tienen la misión de demoler la Tierra para construir una supercarretera espacial. Arthur y Ford consiguen abordar una nave de los Vogones y se salvan al ser destruida la Tierra, pero el gusto les dura poco al ser descubiertos y arrojados al espacio.
Por fortuna son rescatados por la nave Heart of Gold, tripulada por Tricia McMillan (Zooey Deschanel) y Zaphod Beeblebrox (Sam Rockwell), presidente de la Galaxia, fugitivo tras robarse la nave, única en su tipo, propulsada por un motor de Improbabilidad Infinita. Con ellos viaja Marvin (Warwick Davis con la voz de Alan Rickman), un androide deprimido y paranoico.
Curiosa, o mejor dicho, improbablemente, Zaphod es quasi-medio hermano de Ford, en tanto que Tricia, ahora llamada Trillian, fue blanco de un intento de ligue de parte de Arthur en una fiesta meses atrás, hasta que Zaphod llegó a interrumpirlos y ella se fue con él. El singular quinteto se lanza en busca de Magrathea, un mítico planeta donde se supone fue construida la gran computadora Deep Thought, misma que diera la respuesta a la gran pregunta sobre la Vida, el Universo, y todo lo demás: 42.
Lamentablemente nadie sabe cual es la pregunta exacta para esa respuesta, y el tratar de averiguarlo es la base para toda clase de intrigas interespecies. El grupo corre varias aventuras antes de localizar el mítico planeta y su supercomputadora, logrando en el proceso averiguar la verdadera razón detrás de la destrucción de la Tierra y descubrir los planes de la que fuese la especie más inteligente del planeta (y no, no son ni los humanos ni los delfines).
El elenco de la película es complementado por otros actores de respeto: John Malkovich, Bill Nighy, Anna Chancellor y Helen Mirren, lo que quiere decir que al menos en talento actoral no se escatimaron esfuerzos. El resultado es una entretenida e inteligente película, totalmente reminiscente del trabajo del autor de la obra original.
El humor de Adams es adecuadamente trasladado a la pantalla, por momentos incluso demasiado bien, pues es normal encontrar gente que se queja de no entender el humor británico, o al menos no el de Douglas en particular, y es algo que puedo entender. Si les gusta el humor de Monty Python o el de Benny Hill no debieran tener problemas con Douglas, que es mucho menos rebuscado y local. Tal vez sea más cercano al humor de Terry Pratchet, buscando alusiones y referencias más universales.
Ya cuando termine veré si es pertinente cazar el sexto volumen, mismo que apareció recientemente y firmado por un autor aprobado por los herederos de Adams. En su momento lo comentaré.
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