viernes, 11 de enero de 2019

2018 en cómics: Image y otras editoriales

Supongo que este es el último texto que dedico a repasar el 2018 en el medio del entretenimiento. Empecé comentando sobre algunos creativos que perdimos en el camino, luego acerca de mis películas favoritas del año, sobre algunas generalidades en el medio del cómic, y más recientemente acerca de mis lecturas de cómic favoritas entre lo publicado por Marvel y DC. Ahora toca el turno a las publicaciones de Image Comics y otras editoriales.

Repito lo que ya he expresado: no soy un crítico profesional, pero leo cómics desde hace más de 35 años y trabajo en el medio desde hace casi veinte. Esta lista no refleja "lo mejor" del año (leo mucho, pero no tanto como para permitirme ser tan categórico y tajante) sino las lecturas que más disfruté en los pasados doce meses. Sin un orden particular, mis cómics favoritos no-Marvel-o-DC de 2018.

My Heroes Have Always Been Junkies (Image Comics).
A estas alturas sobra decir que el combo formado por Ed Brubaker y Sean Phillips es garantía de calidad. Recientemente renovaron su contrato con Image Comics, y este año, además de finalizar Kill or Be Killed, publicaron su primera novela gráfica, My Heroes Have Always Been Junkies.

Como era de esperarse, se trata de una historia oscura con tintes de romance retorcido y aderezada con algunas referencias pop. El único pero posible es que al terminarla uno se queda con ganas de leer más.

Monstress (Image Comics).
La épica de fantasía de Marjorie Liu y Sana Takeda sigue ganando en ritmo y complejidad. Combinando un exquisito diseño de personajes hermosamente ilustrados con un impecable trabajo de construcción de mundo, resulta impactante que tanta destrucción pueda lucir tan hermosa.

La sola historia de Maika Halfwolf es suficiente para hacer de éste un titulo muy atractivo con el complejo balance entre sus conflictos internos y externos, pero el arte de Takeda la eleva al nivel de lectura imprescindible para cualquier aficionado a la fantasía o a la narrativa secuencial.

Black Hammer (Dark Horse Comics).
Es impresionante el volumen de cómics de gran calidad que Jeff Lemire parece producir año tras año. En 2017 sorprendió al mundo con Black Hammer, un completo universo de héroes y villanos que exploró en doce números. En 2018 expandió ese mundo con miniseries como: Doctor Star & The Kingdom of Lost Tomorrows, Black Hammer: The Quantum Age, Black Hammer: Age of Doom y Sherlock Frankenstein and the Legion of Evil, además del especial Cthu-Louise. Si no se han sumergido en este mundo, les recomiendo que lo hagan a la brevedad posible, no se van a arrepentir.

Coda (BOOM! Studios).
Otro escritor que parece volar bajo el radar pero consistentemente entrega grandes historias es Simon Spurrier. Coda es un cómic de fantasía que parece tocar algunos de los elementos más comunes del género para ponerlos de cabeza y crear algo nuevo que a la vez se siente familiar.

Una aventura épica que no teme mostrar momentos íntimos y conmovedores de la vida de pareja de su protagonista, y coronada con el espectacular arte de Matias Bergara. Sin duda de las mejores series en debutar el año pasado.

Saga (Image Comics).
Saga ha sido una serie tan buena a lo largo de toda su historia que a veces se nos olvida que solía sorprendernos todo el tiempo en su primer par de años. Muchos dirán que la mayor sorpresa que dio en 2018 fue el anunció de que la serie hará una pausa para recargar baterías, pero el cliffhanger con que nos dejo sin duda alterará el rumbo de la serie una vez que vuelva. 

Brian K. Vaughan y Fiona Staples no se duermen en sus laureles, y todos deberíamos estar agradecidos por ello. Ahora sólo nos queda esperar a que vuelvan de su merecido descanso.

Judas (BOOM! Studios).
Cuando la gente me pregunta por mi religión, suelo bromear diciendo que soy cínico ortodoxo. Lo menciono porque mi ateísmo puede ser una de las razones por las que disfruté esta historia que próximamente publicará en México Panini. ¿Les conté que estuve a punto de ser el traductor? ¿No? Pues casi.

Jeff Loveness da vuelta a la tortilla para contar la historia de Judas, quien está resentido por haber sido usado para convertir en mártir a un mesías que quizás no merecía ser seguido ni admirado.

Más sutil que, por ejemplo, Garth Ennis, Loveness deconstruye la historia del "traidor" con aplomo, alternando ira, tranquilidad y horror de gran manera, complementado con el arte de Jakub Rebelka, artista a quien no conocía pero a quien no pienso descuidar ahora que he visto su trabajo.

The Wilds (Black Mask Studios).
Las historias de zombis enfrentan el reto de que a estas alturas parece que lo hemos visto todo, pero Vita Ayala y Emily Pearson logran hacer algo diferente alejándose del gore que predomina en el subgénero. Daisy es una camionera que transporta cargamentos entre asentamientos humanos en un mundo en que una infección bacterial puede convertir a los humanos en vegetales ambulantes. La historia es desgarradora, y explora temas como clasismo, racismo y los peligros que derivan del privilegio.

Una cita de Daisy ayuda a hacerse una buena idea del tono de la serie: "Eran como un vengativo jardín. Como si la Madre Naturaleza, harta de nuestra mierda, hubiera enviado a sus hijos a deshacerse de nosotros".

Fu Jitsu (Aftershock Comics).
La miniserie salió mayormente en 2017, pero no quería omitirla. Jai Nitz y Wesley St. Claire cuentan la historia del chico más listo de la Tierra, quien lo ha sido durante cien años. Este genio que no envejece ha corrido aventuras por todo el mundo y alrededor de la galaxia, y ha conocido a toda clase de celebridades, de Einstein a Gandhi o los Hermanos Wright, pero vive exiliado en la Antártica para tratar de superar el rompimiento con su ex-novia. Ahora debe lidiar con James Dean, el mejor asesino al servicio de su archienemigo, Robert Wadlow, quien usa magiciencia desde el futuro para tratar de apoderarse del mundo. ¿Acaso no suena divertido?

Menciones honoríficas:
Deadly Class (Rick Remender y Wes Craig, Image Comics), Flavor (Joseph Keatinge y Wook Jin Clark, Image Comics), The Weatherman (Jody Lehup y Nathan Fox, Image Comics), Death or Glory (Rick Remender y Bengal,  Image Comics), The Dead Hand (Kyle Higgins, Stephen Mooney y Jordie Bellaire, Image Comics), Prism Stalker (Sloane Leong, Image Comics), Skyward (Joe Henderson, Lee Garbett y Antonio Fabela, Image Comics), Sex Death Revolution (Magdalene Visaggio, Kasia Witerscheim y Harry Saxon, Black Mask Studio).

Creo que 2018 fue un gran año para los cómics, y no veo razones para pensar que 2019 será distinto. ¿Alguien tiene alguna lectura que me quiera recomendar? ¿Algún título poco conocido que les gustaría que más gente conociera?

No hay comentarios.:

Publicar un comentario