El día de ayer falleció la modelo y playmate Anna Nicole Smith a los 39 años de edad.
Smith saltó a la fama en marzo de 1992 al aparecer en las páginas de Playboy, revista que la nombraría Playmate del Año en 1993. Adoptada por los medios como "la nueva Marilyn", Smith consiguió ese mismo año un contrato de modelaje con la prestigiosa marca Guess, lo que la colocó en anuncios de TV, impresos y espectaculares por todo el mundo. Su imagen debe haber decorado los cuadernos de una gran cantidad de estudiantes de secundaria y bachillerato durante la primera mitad de los 90s.
En los últimos años su vida se convirtió en una serie de escándalos: subió de peso de manera descontrolada, lanzó una línea de ropa de tallas extragrandes y se convirtió en activista contra el uso de pieles; se casó con un magnate petrolero que la dejaría viuda y millonaria en poco tiempo y fue parte de un pleito legal por el control de su herencia; protagonizó un reality show donde exhibía ante el público sus problemas para controlar su peso, etc.
En septiembre del año pasado dio a luz a una bebé cuya paternidad se encuentra en medio de una disputa legal, y a los pocos días sufrió la pérdida de su hijo de 20 años.
El día de ayer fue encontrada inconsciente en su habitación del Seminole Hard Rock Cafe Hotel & Casino de Hollywood, Florida por una mucama. Un guardaespaldas le practicó primeros auxilios en el lugar y fue trasladada a un hospital donde horas más tarde se le declaró muerta. Las causas de su deceso se desconocen en estos momentos, pero se especula sobre una posible sobredosis de droga.
Descanse en paz.
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