miércoles, 2 de junio de 2010

The Losers

A estas alturas queda claro que las películas basadas en cómics y novelas gráficas atraviesan por un buen momento y su producción, al menos por los próximos años, se seguirá dando de forma constante y con más de una producción por año. La más reciente de estas adaptaciones es The Losers, película basada en la serie de comics del mismo título creada por Andy Diggle y Jock, publicada hace años bajo el sello Vertigo, de DC Comics.

Una unidad de fuerzas especiales que hace operaciones encubiertas para la CIA, es encomendada con la misión de señalar la casa de un narcotraficante en Bolivia para que pueda ser bombardeada desde el aire.

El equipo encuentra la casa, la "marca" y reporta que el ataque puede llevarse a cabo. Instantes después se dan cuenta de que en la casa en cuestión hay una docena de niños. Tras infructuosamente tratar de convencer a sus superiores de cancelar el ataque, el grupo realiza una incursión en la casa para sacar a los niños. Cumplen su objetivo y se reportan al lugar señalado para su extracción, pero no hay espacio suficiente en el helicóptero para llevarlos a los niños y a ellos, así que envían a los niños y buscan otro medio para salir por su cuenta.

Pero uno de ellos intercepta una transmisión de radio que parece apuntar a convertirlos en blanco. De la nada surge un avión que dispara contra el helicóptero, haciéndolo pedazos y matando a todos a bordo, incluyendo a los niños. Horrorizados, los miembros del equipo murmuran "se suponía que seríamos nosotros", y arrojan sus dog tags a los restos del helicóptero. Oficialmente están muertos y es hora de planear su venganza contra Max, el misterioso hombre a quien no conocen pero que es el presunto responsable de haberlos traicionado.


Intenso, ¿no? Y todo eso antes de la secuencia de créditos, la cual nos revela las identidades de los miembros del equipo: Clay (Jeffrey Dean Morgan), el líder del grupo; Roque (Idris Elba), táctica y demoliciones; Jensen (Chris Evans) computadoras y comunicaciones; Pooch (Columbus Short), transporte; Cougar (Oscar Jaenada), eliminaciones de largo alcance.

Atrapados en Bolivia y sin forma de volver a Estados Unidos, el grupo empieza a tener fricciones, aunque Clay mantiene las esperanzas de hallar cómo recuperar sus vidas y vengarse de quien se las arrebató. Aparece en escena Aisha (Zoe Saldana), una mujer con los contactos necesarios para permitirles volver a su país y financiarlos en la búsqueda de Max, a quien ella quiere matar por sus propias razones. El grupo accede a trabajar con ella, no sin cierto recelo, y ponen manos a la obra.


La película tiene un ritmo rápido que nunca decae, está llena de buenas escenas de acción, y suficientes efectos especiales como para satisfacer a cualquier fan del género. La historia no tiene mayores pretensiones, y se limita a crear un armazón que justifique las secuencias de acción y haga ver bien a los héroes, por momentos coqueteando peligrosamente con el terreno de la farsa o la parodia, pero se mantiene dentro de una simple exageración que le sienta bastante bien al género (igual que a los cómics).

La historia del comic se traduce a este medio sin demasiados cambios. Un poco más suave la violencia gráfica, un vocabulario ligeramente menos altisonante, y tal vez un poco de protagonismo temprano para el personaje de Aisha, pero nada como para ofender a los fans del cómic.


Me sorprendió el trabajo de dirección de Sylvain White, dado que sólo cuenta en su currículo con algunos proyectos directo a video, incluyendo la última entrega de I Know what You did Last Summer, y una película, Stomp the Yard, que nunca supo definirse entre drama, musical, película de baile o algún ente con identidad propia. Pero White y su cinematógrafo, Scott Kevan, tienen buenas ideas para crear visuales interesantes en las secuencias de acción, y alcanzan momentos de brillantez en algunas partes de la película.

La historia no tiene mayores pretensiones y depende bastante del carisma de sus protagonistas. Estos cumplen a la perfección con lo que se espera de ellos en estos papeles, tan estereotipados que rayan en el cliché, pero lo hacen de buena manera, sobre todo Evans, Saldana y Elba. A Columbus Short y Oscar Jaenada no los conocía, pero su trabajo aquí es tan sólido como la historia se los permite.


Mi única queja sería con Jeffrey Dean Morgan, que trata de llevar a su personaje a base de carisma y presencia, cuando ninguna de esas cualidades es su fuerte. Por fortuna la película funciona como una obra de grupo y el resto del elenco carga con él durante la mayor parte de la película. En general me queda la sensación de que el elenco se divirtió tanto haciendo la película que logran contagiar un poco a la audiencia.

Temas morales, un detallado desarrollo de personajes, y crítica social con temas de actualidad no son características que uno encuentre frecuentemente en películas de acción, así que les sugiero no molestarse en buscarlas en The Losers porque no las hallarán. Se trata simplemente de una honesta y desvergonzada película de acción cuyo principal objetivo es crear hora y media de violento entretenimiento para los aficionados al género. Misión cumplida.


Lo siento por The A-Team y The Expendables, porque ya tenemos un estándar de comparación.

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