Un día, de repente, algunas personas comenzaron a flotar.
La información que se difundió a través de los medios aseguraba que las personas que se encontraban en los cielos, eran aquellas que amaban profundamente.
El mundo entró en un caos tremendo.
Parejas se separaron al encontrar que solamente uno de ellos podía flotar, amores secretos fueron revelados y cuando un corazón se rompía, ese individuo caía como una pluma de los cielos. Hubo algunos que se amarraban pesas en los pies para no elevarse demasiado o para disimular.
Mientras tanto, las personas amargadas volteaban a ver con envidia a las alturas, y hacían planes para construir máquinas para alcanzar los cielos.
Pero poco a poco, la gente se fue acostumbrando a ver personas flotando por las calles.
A finales de mayo comencé a flotar. Primero unos pocos centímetros, pero recientemente alcancé las nubes por primera vez.
Es la mejor sensación que existe en todo el mundo.
He vuelto a volar.
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