El director puertorriqueño Miguel Arteta tiene muchos años trabajando en Hollywood, pero fuera de un puñado de películas de modesto presupuesto, lo más conocido de su trabajo ha sido en episodios para series de TV como Six Feet Under, The Office o Ugly Betty, así que no es sorpresa que su nombre sea desconocido para la mayoría de los cinéfilos.
Nick es tímido e introvertido, por lo que no hace gran cosa en busca de cambiar nada en su vida, pero cuando durante un viaje conoce a Sheeni Saunders (Portia Doubleday), su mundo se torna de cabeza.
Sheeni es hija de un matrimonio ultraconservador y religioso, lo que representa un duro obstáculo en el desarrollo de la relación entre ambos. Sheeni es de carácter fuerte y en su interior se opone a muchas de las ideas de sus padres pero nunca los reta abiertamente. Tiene un novio, Trent, que es un par de años mayor que ella, escribe poesía experimental y es considerado un estudiante modelo en su escuela, además, claro de ser un atleta consumado.
Pero lo único que tiene que hacer Nick para superar a ese aparente novio ideal es ofrecer a Sheeni la oportunidad de tener una vida de aventuras y glamour. Es decir, convertirse en alguien más. Nick crea en su mente a Francois Dillinger como la clase de hombre que sería capaz de seducir y cautivar a Sheeni, y empieza a decidir el curso de sus acciones tal y como serían si él fuese como Francois.
Esta recién encontrada rebeldía lo lleva a confrontar a su madre, quien lo envía a vivir con su padre, movimiento previamente calculado por Nick con la idea de mudarse más cerca de donde vive Sheeni. Cuando los padres de ella descubren lo que Nick hizo para disgustar a su madre, deciden enviar a Sheeni a un internado, lo que supondrá otro reto para las habilidades de Nick bajo la persona de Francois.
Youth in Revolt es una comedia juvenil de tintes románticos que se aleja de los convencionalismos del género e intenta ser más propositiva y original, con un humor ligeramente más oscuro y menos burdo que el de las comedias adolescentes. Me encantó el desempeño de los actores en general, sobre todo por la acertada decisión de reunir a un elenco de intérpretes capaces pero de bajo perfil que incluye, además de los mencionados, a M. Emmet Walsh y Justin Long. Pero el show se lo roba la pareja protagonista.
Michael Cera tiene el problema de que todo mundo le da papeles similares al que le diera fama en la exitosa serie de TV Arrested Development, y ojalá que con el excelente trabajo que hace en esta cinta con el doble papel de Nick Twisp/Francois Dillinger y su próxima aparición como el personaje titular en Scott Pilgrim vs. The World pueda por fin explotar su potencial. Por otro lado, Portia Doubleday debe ser uno de los hallazgos del año. Atractiva y con un talento sobresaliente, seguro se convertirá en un rostro recurrente en la pantalla.
Youth in Revolt es una entretenida comedia que debe ser del agrado de casi todo público, aunque una queja común que he escuchado es que no hace honor a las novelas en las que está inspirada. Habrá que buscarlas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario