London calling to the faraway towns
Now war is declared - and battle come down
London calling to the underworld
Come out of the cupboard, all you boys and girls
London calling, now don't look at us
All that phoney Beatlemania has bitten the dust
[...]
Now get this
London calling, yeah, I was there, too
An' you know what they said? Well, some of it was true!
London calling at the top of the dial
After all this, won't you give me a smile?
-London Calling, The Clash
El pasado jueves 7 de Julio se produjeron una serie de atentados terroristas en Londres, capital de la Gran Bretaña, donde unos kilómetros más al norte, en Edinburgo, se encontraban reunidos los líderes de las siete naciones más ricas del mundo. Tres explosiones simultáneas en el Underground (el "metro" londinense) y una más en un autobús de dos pisos sembraron el caos entre centenares de londinenses que buscaban trasladarse hacia sus trabajos de manera cotidiana.
Desde el ataque al World Trade Center de Nueva York en Septiembre del 2001 y la respuesta armada de los Estados Unidos, primero en Afganistán y después en Irak se gestó un estado de hostilidad permanente entre los grupos islámicos, Al Qaeda siendo el más notorio de ellos, y los estadounidenses y sus aliados. En Marzo del año pasado Madrid sufrió de un atentado muy similar al acaecido en Londres cuando se registraron multiples explosiones en el tren de la ciudad. Sólo era cuestión de tiempo para que sucediera algo similar en el Reino Unido, donde las autoridades ya habían evitado incidentes en al menos dos ocasiones. Tal vez la seguridad en Londres no era la acostumbrada debido al operativo en Edinburgo. Tal vez.
De lo que no hay duda es de que Bush y sus aliados están pagando la factura de su intervención armada en Oriente Medio. La popularidad de Bush cae día con día y los expertos no vislumbran una salida de Irak a corto plazo y las bajas siguen acumulándose más allá de cualquier proyección. La Gran Bretaña se enfrenta al reto de optimizar su seguridad con miras a su futura Olimpiada mientras que Italia y Dinamarca, otras dos naciones que respaldaron a Bush, hacen lo que pueden por reforzar su seguridad ante la inminente posibilidad de ser las próximas victimas.
Atrás quedó la promesa de Bush y Blair de que una vez derrocado Saddam en Irak el mundo sería un lugar más seguro. Por tierra han quedado sus argumentos de que Irak representaba un apoyo vital para Al Qaeda y otros grupos extremistas. Curiosamente estos grupos hacen un uso ejemplar de la globalización promovida por los grandes capitales, separándose en pequeñas células que operan en proyectos separados utilizando todas las herramientas tecnológicas a su alcance. Y el resultado es un estado permanente de terror y paranoia, donde las autoridades en los posibles blancos no tienen forma de discernir entre falsas alarmas y verdaderas situaciones de emergencia.
Sin duda esto servirá de pretexto a los grupos consevadores en esas naciones para promover las multiples iniciativas ya existentes para reprimir las libertades individuales y el flujo de inmigrantes a esos países. Pareciera que mientras economistas y analistas de todo el mundo se encuentran preocupados por el acelerado crecimiento de la economía china las grandes potencias han decidido imitar las políticas de aquella nación asiática, al menos en lo que se refiere a las libertades individuales. ¿Puede este ser el inicio de una nueva época de oscurantismo y cerrazón? ¿Seguirán buscando las grandes economías promover la apertura de fronteras en todo el mundo al tiempo que hacen todo lo posible por cerrar las propias? Sólo el tiempo nos dará una respuesta.
Gracias.
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