El nombre de Greg Rucka debe ser familiar para casi cualquier lector de cómics que siga títulos de Marvel o DC, y para quienes prefieren sus historietas libres de capas y spandex es probable que conozcan su trabajo por títulos como Queen & Country, publicada por Oni Press, o Lazarus, aún en progreso bajo el sello Image, pero me parece que no muchos ubican la serie que marcó su debut en el medio de la narrativa visual: Whiteout.
En 1998 Rucka gozaba de cierto prestigio como novelista gracias al éxito de sus novelas Keeper y Finder, protagonizadas por Atticus Kodiak, un guardaespaldas profesional. Joe Nozemack y Bob Schreck, cabezas de la naciente Oni Press, se encargaron de ultimar los detalles y poner a Rucka en contacto con Steve Lieber, artista entonces conocido por su trabajo en Hawkman, en la serie post-Zero Hour, y de reclutar la ayuda de algunos amigos famosos para las portadas de la serie. Éste fue el resultado de esa colaboración.