Hablando de relaciones humanas, hay ocasiones en las cuales uno se da cuenta que la regó, que hizo algo mal. Pero que uno no sabe en qué exactamente se equivocó.
Y para acabarla de amolar, uno intenta solucionar el problema, pero solamente se empeora. No podría haber un dicho más ad hoc que "saltar de la sarten al fuego" para describir esa situación.
Bueno, ahora estoy en el fuego y siento mucha incertidumbre. Si, esa odiosa incertidumbre que nada más viene para hacernos sentir como en un limbo.
En fin, espero que la luz que se ve al final del túnel no sea un espejismo.
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