Lucha por la red

Una de las principales razones para considerar revivir este blog es la poca paciencia que le tengo al funcionamiento de las redes sociales, en particular Facebook, y al interés de que cuando escribo algo tenga después alguna forma de consultarlo si es que lo necesito. Cuando se trata de algo sobre cómics, a veces (aunque no siempre) se convierte en un artículo para La Covacha,  Pero cualquier otra cosa acaba, usualmente, como un mini-rant en Twitter.

Me han preguntado por qué no soy fan de las redes sociales más populares, y es algo bastante simple: sus políticas me parecen tontas, aún cuando entiendo que obedecen al interés de capitalizar sus plataformas, mismas que son de uso "gratuito" para sus millones de usuarios. En el caso de Facebook está el tema del algoritmo que nadie entiende y con el que la plataforma "filtra" las publicaciones de tus contactos para ofrecerte el contenido "más interesante". La versión web para computadoras de escritorio permite elegir entre las historias más recientes o "las mejores" en tu timeline, pero no existe garantía alguna de que verás lo que esperas o desearías.

No importa si sigues las páginas de tus artistas, series o películas favoritas, ver sus publicaciones está sujeto a los caprichos del algoritmo, o peor aún, a que los creadores de ese contenido cedan a la presión de FB para invertir en promover sus publicaciones, Y ni hablar del buscador interno. FB creó una barrera que impide a Google y otros buscadores revisar el contenido del sitio, y es comprensible, pues Zuckerberg y compañía preferirían beneficiarse ellos mismos de conocer tu actividad en su red. Pero eso no excusa lo malo de su buscador.

Para mí es una molestia constante, pues cada semana tengo que lidiar con sus excéntricas e incomprensibles limitantes. Como responsable de las galerías #Artweek en La Covacha (échenles un vistazo, hay piezas que valen mucho la pena), debo hacer una búsqueda del hashtag semanal para recopilar las imágenes. Y los resultados son frustrantes. A veces paso horas lidiando con el buscador de FB para asegurarme de ver todas las imágenes participantes, y aún así es casi seguro que termine ocultándome al menos un par.

Twitter ofrece más opciones para controlar lo que veo, sobre todo con el uso de listas, y por eso es mi red social preferida, pero también cambiaron su buscador, y parece que hicieron algo para limitar el uso de Google en su plataforma. Es difícil buscar tuits viejos, pues su buscador no parece optimizado para buscar dentro de los tuits. Eso lo note porque hay cuentas donde consulto información, y desde mediados de diciembre ya no funciona la forma en que buscaba en ellas.

Y por eso pensé en revivir el blog. No haré planes sobre periodicidad o la clase de contenidos que agregaré, pero no se sorprendan de encontrar material similar al que he publicado en el pasado: cine, deportes, libros y necedades varias. También hay borradores que quedaron guardados. Algunos los publicaré como si los acabara de terminar (en ocasiones será cierto), pero otros, cuyo contenido los hacía relevantes en algún momento en particular, serán ignorados o aparecerán con la fecha en que los hubiera publicado de no haber dejado de actualizar. Lo más probable es que no se pierdan nada interesante.

Así que, gracias por leerme, y ya veremos que resulta de todo esto.