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domingo, 20 de enero de 2008

Se cancela la película de la Justice League

Al menos por ahora. O eso dice Warner Pictures. Esta semana se venció el plazo que el estudio había fijado para hacer válida la opción en el contrato de los jóvenes actores seleccionados para interpretar a los miembros de la Liga. Aparentemente el estudio decidió posponer el inicio de los trabajos en el proyecto por una mezcla de razones, incluyendo la incertidumbre fiscal sobre los supuestos beneficios que obtendrían al filmar en Australia y la imposibilidad de hacer algunas correcciones al guión de Kieran y Michele Mulroney hasta que no se resuelva la huelga de escritores en Hollywood.



La película debía empezar su producción esta primavera, pero ahora no se hará nada al menos hasta finales del verano o principios del otoño. Si es que se hace algo. Lo curioso es que el estudio comunicó a los actores seleccionados por el director George Miller que no aplicaría la opción en sus precontratos, pero aseguró estar comprometidos con el proyecto y que ellos siguen siendo la primera opción para los papeles que se les habían asignado. Lo extraño es que el contrato estipulaba dos posibles fechas para empezar a trabajar con los actores: febrero o julio. ¿Por qué tanto escándalo anunciando que se pospone el proyecto si la fecha no era definitiva?

Y no se trata de dar libertad a los actores de involucrarse en otros proyectos, pues mayormente son desconocidos con un curriculum poco notable en televisión, con la única excepción de Adam Brody (Seth Cohen en The OC, quien ya ha trabajado en cine con partes menores en películas, como Mr. and Mrs. Smith, también de Warner) quien habría de interpretar a Wally West/Flash. El resto del elenco anunciado incluía a Armie Hammer Jr como Bruce Wayne/Batman, Scott Porter como Clark Kent/Superman, Megan Gale como Diana/Wonder Woman, y el rapero Common interpretando a John Stewart/Green Lantern.

Tal vez este retraso sea lo mejor que le pudo suceder a la película, ya que la idea original de tenerla lista para estrenarse en el verano de 2009 parecía demasiado complicada. De retomarse el proyecto la fecha de estreno sería probablemente trasladada al 2010. Tomando en cuenta el juvenil elenco seleccionado y el historial del director, cuyas únicas películas en los últimos 10 años son Happy Feet y Babe 2, proyectos muy diferentes a los que le dieron nombre hace más de veinte años, como Mad Max, Mad Max II y Mad Max III: Beyond the Thunderdome, el tono de la película parecía apuntar a aventuras ligeras con un tinte de comedia.

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