Hace unos días se cumplieron 65 años de la presentación del primer bikini y, aunque sea con un poco de retraso, se trata de un suceso que no podíamos dejar de celebrar.
Desde entonces el bikini ha gozado de gran popularidad y se le puede ver no sólo en playas de todo el mundo, sino como una parte importante de la cultura popular occidental, presente en toda clase de películas, series de televisión y revistas. A continuación comento algunos de los ejemplos más conocidos de piezas icónicas de este tipo de trajes de baño.
Ursula Andress se convirtió en la primera chica Bond al interpretar a Honey Ryder en Dr. No (El Satánico Dr. No), primera película de la popular saga de aventuras del agente 007. Andress dejó su huella en la serie y en la cultura popular al emerger del mar vistiendo un bikini blanco complementado con un cinturón con una funda de cuchillo pegada a la cadera.
Ese atuendo ha sido empleado como homenaje y parodia en toda clase de películas y series de TV, desde Austin Powers hasta la misma franquicia de Bond, pues Halle Berry porta un bikini de color anaranjado en Die Another Day (Otro Día para Morir). El bikini utilizado por Andress fue vendido en una subasta en 2001 al increíble precio de sesenta y un mil quinientos dólares.
Parte importante en la cultura del bikini es la edición de trajes de baño de Sports Illustrated, que genera especiales de televisión, además de un popular y exitoso calendario. La primera edición del Sports Illustrated Swimsuit Special apareció en 1964 y la modelo de portada fue la alemana Babette March, quien posó en las playas de Cozumel, México, con un bikini blanco que para estándares actuales sería recatado.
La redacción de la revista se vio inundada de correspondencia de los lectores, que no sólo deseaban conocer a la modelo, a quien invitaban a salir o vacacionar con ellos, sino que muchos incluso escribieron para proponerle matrimonio. Ser elegida para adornar la portada es considerado uno de los puntos más altos en la carrera de una modelo, quizá sólo equiparable a la portada del catálogo de Victoria's Secret.
Los ochenta tienen dos bikinis memorables que marcaron a una generación. El primero es de la película de culto: Fast Times at Ridgemont High (Picardías Estudiantiles), una de las primeras actuaciones de Sean Penn y Jennifer Jason Leigh, y uno de los primeros guiones de Cameron Crowe. Para los fans de la trivia, incluye también algunas de las primeras apariciones en pantalla de Nicolas Cage y Forest Whitaker.
Para muchos otros, esta película resulta inolvidable por la aparición en ella de Phoebe Cates interpretando a Linda Barrett, o más específicamente porque contiene una icónica escena en que se le ve emerger de una piscina luciendo un bikini rojo. Supongo que el hecho de que instantes después se despoje del mismo también puede tener algo que ver con su popularidad.
El otro aparece en The Return of the Jedi (El Regreso del Jedi). Tras fallar en rescatar a Han Solo, la Princesa Leia es capturada y convertida en esclava de Jabba. Su bikini de latón se mantiene popular a casi treinta años de distancia, usado por cosplayers de todo el mundo en eventos y convenciones pese a ser una prenda muy incómoda, descrita por Carrie Fisher como la clase de atuendo que las supermodelos usarán en el infierno.
Estos son sólo algunos de los bikinis más famosos que recuerdo en estos momentos, pero hay muchos más que por una u otra razón han dejado huella en la cultura pop contemporánea, al menos en occidente. ¿Recuerdan ustedes alguno en particular que no haya mencionado aquí? ¿Tienen algo que comentar sobre los que mencionamos o sobre los bikinis en general? Nos encantaría leer sus opiniones.
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